Salir a correr sin más, así de simple es lo que me he planteado en estos momento de baja moral los siguientes meses venideros. Cuando estoy mas pendiente de mis progresos, en vez de disfrutar de mis zancadas del día a día, es señal de me estoy desviando desde hace meses de lo que entiendo por correr.
Quizás me ha llegado el momento de decidirme a tomar un respiro, no dejar de correr y seguir con el gimnasio. Salir 4 o 5 días a correr, reforzar músculos y apartarme por unos meses de las competiciones. Desde el mes de enero del 2009 voy para atrás, en sensaciones y el tiempo de meta en carreras de rutas son nefastas, las peores desde que me inicié en agosto de 1996. Mi experiencia me dice que debo de dejar atrás esas obsesiones por mejorar y volver cuando me vea preparado, sin prisas.
Con ello no quiero decir que no me gusta competir, creo que me gusta como al que mas. Pero debo de pasar unos meses sabáticos alejado de los dorsales.
No sé si para septiembre, octubre habré cambiado de parecer y piense en la primera maratón de mi ciudad. Quizás me decante por volver a Sevilla en febrero, a Madrid en abril, queda mucho para todo. Correr es un deporte para personas paciente, sin prisas, sabemos que los resultados vienen a largo plazo. No hay un corredor que obtenga buenos resultados en un corto periodo de tiempo, y si lo hubiera, es porque son de otro planeta, son punto y aparte. A nadie le regala nada, todo debe de salir de nuestro esfuerzo y sacrificio, así conseguiremos llegar a donde nos propongamos, siempre que las marcas no sean disparatadas.