"No soy más que un aprendiz de buena persona y un corredor esforzado". Toni Lastra (Corredor, escritor o viceversa)
Por cada corredor que recorre el mundo participando en maratones, hay miles que corren por el gusto de escuchar las hojas y la lluvia y que esperan que llegue el día en que les resulte todo tan fácil como a un pájaro volar. Para ellos el deporte no es una prueba, sino una terapia; no es un desafío, sino una recompensa; no una pregunta, sino una respuesta.
Cuando no queremos estorbar los ritmos de los compañeros, cuando el ritmo de ellos es exigente y tus piernas no dan para tanto. Cuando por varias causa las horas de salida no nos vienen bien. Por muchos cuando, nos vemos obligado a correr en solitario. Ese en mi caso actual, pero lo prefiero a no correr. No me molesta correr solo, me exijo o me acomodo según el día.
A veces algún corredor, como fue no hace mucho, me pregunta con cortesía si me puede acompañar; es que hoy no puedo, voy mal, me dijo el joven. Charlamos durante el trayecto de carreras y al final me agradeció mi compañía. Yo le contesté que el agradecimiento era mutuo, siempre se agradece el ir acompañado.
Día tras días salgo ahí afuera, me divierto aunque sea en solitario, pienso en mis cosas o no pienso en nada. Tan solo se que al acabar me siento espléndidamente bien. Aunque haya corrido tan solo 30 o 40 minutos, me da igual. Correr me libera de tensiones y me hace empezar o terminar el día de una forma excepcional, y eso en los tiempos que corre, bien merece la pena correr esos kilómetros diario.
No me cabe la menor duda, estoy tan enganchado a esto del correr y todo lo que le rodea, que aún con el paso de los años, cada vez disfruto mas y mas. Y todo esto a pesar de que no levanto cabeza, es decir, que mis incursiones como corredor, no van mas allá de los 8 kms. No por falta de ganas, pero es que me es imposible hacer mas. Mi caja de cambio (corazón y pulmón) va viento en popa, pero son esos isquios imposibles de enderezar.
Si miro hacia atrás, nunca he sufrido de esta temible lesión. He tenido periostitis y tendinitis aquí y allá, pero siempre me he mantenido en mi carrera mínima de 12 o 14 kms. Pero a lo que iba, a pesar de todo sigo con ganas. Mas bien tarde que temprano saldré de esta y entonces volveré a mis 20 kms los fines de semanas, mientras tanto a disfrutar de lo poco que hago. En plan de peso voy muy bien, ya he dejado los 70 kilos atrás. Mis abdominales y lumbares me acompañán casi a diario y dedico bastante tiempo a estirar y ha hacer algo de yoga. Hago trabajos con bandas elásticas tres o cuatro días en semana para fortalecer estas piernas. Más no puedo hacer, otros quizás hubieran desistido a seguir corriendo porque se miran mas en la competición (cosa que me encanta mucho-bastante) pero correr para mi es terapéutico, y mas ahora con esta crisis tan gorda.
Ya me he perdido la Carrera urbana ciudad de Málaga, me perderé Cabra, Córdoba, Sevilla-Los Palacios y yo que se más. Lo digo con bastante dolor, para que sepáis que me gusta de competir e ir año tras años a mis carreras preferidas, pero así están las cosas, bastante turbia...pero seguiré corriendo.
Hacía año y algo que había dejado de fumar, pero a la vez me dio por comer bastante mas de la cuenta. En mis días libres me estaba empezando a reformar mi casa, dos plantas mas sobre rasante. Pero seguía estando igual de gordo. Cerca de una treintena de kilos había cogido mi menda. Ese era el precio de haber dejado de fumar dos cajetillas de tabacos diario desde los 17 años, el ansia viva por comer y comer.
Todos me decían que Paco estas muy gordo y esas cosas que me bajaban la moral por los suelos. Pero en realidad yo no veía mi drástico cambio, no hacía cuenta hasta verme en un vídeo mientras comía al medio día. Entonces me dije a mi mismo que se acabó eso de ponerme ciego de dulces después de comer, con el cafelito. Hice mal, ya lo se, pero sin endocrino ni ostias en vinagre me puse en un severo régimen alimenticio, por mi cuenta. En cuestión de meses perdí todos esos kilos de sobra.
Luego fue al revés, Paco si parece un cristo, que si patatín o patatán. La cuestión es que mi cambio había sido enorme. Ya sabemos que perder tanto peso en tan poco tiempo demacra bastante. Pero en esos meses desempolvé un viejo libro de mi biblioteca: Correr para vivir mejor de Bob Glover. Libro que me inició a principio de los ochentas a esto del correr, hábito que abandoné al cabo de 8 o 9 meses.
Mientras seguía con mi reforma los fines de semanas, vivíamos en una casa que tenía medio abandonada mi primo. Al llegar por la tarde leía el libro y mi mujer me miraba como diciendo ¿que estará tramando este?
El Miércoles 28 de agosto de 1996, al salir del curro me lancé. Con unas zapatillas de mil y pico pelas (unas Rox o algo por el estilo), unas bermudas y una camiseta de algodón verde me fui al morro de levante de Málaga, a ver si allí no me veía nadie. No se como, pero completé 20 minutos de tirón. Desde entonces mi vida cambió. Seguía con mi obra los sábados y domingos, y por la tarde a correr. Me mudé y seguía igual, solo que con mas tiempo para correr.
"Para mi, correr es una filosofía. Corro para reencontrarme conmigo mismo y llegar a se la persona que soy"
Doctor George Sheehan, corredor y filósofo.
"Lo importante de correr es que uno se sienta bien consigo mismo, que no tenga que rendir cuentas a nadie, que pueda correr por sus sensaciones, dejándose llevar por las emociones obtenidas a lo largo del día"
Como estoy echo un caos, me he planteado tirarme tres meses sabáticos. Sin dejar de correr, pero olvidándome de una palabra clave: ENTRENAR. No es por falta de motivación, ya que el entrenamiento entra dentro del mundo que tanto me gusta, es porque así, a ver si con muchos estiramientos, bajar los kilómetros y las visitas al fisioterapeuta, hace que mis femorales vuelvan al buen estado que me permitan entrenar para X competición.
Las competiciones venideras que acostumbro hacer, en estos tres meses próximos, las tengo no olvidadas, pero si perdidas. Llevo desde Enero sin competir, se dice pronto, pero es duro de decirlo para un corredor que gusta de ellas.
Entiendo al atleta (tanto profesional como amateur) que se tira una temporada alejado de las competiciones por lesión. Yo nunca he estado tanto tiempo apartado de ellas, y es mas, no se como he podido seguir haciendo entradas en este blogs sin competir. Pero amo este mundillo, nunca he sido tan persuasivo en un deporte, cosa que he logrado con este y eso es lo que me permite ser optimista y os agradezco, a ustedes amigos blogueros, vuestra paciencia con mis entradas tan repetitivas. Pero es así como estoy ahora, dentro de X meses espero contaros mis progresos y mis competiciones, ahora mientras tanto solo os puedo contar las miserias de un corredor de fondo en horas muy bajas.
Una de mis rutas por el curso de un arroyo (Cantal-La Pepa)
Es la releches lo que me pasa. Voy bien, divino, pero a partir del km 9 o 10, los isquios otra vez. Esta semana no he estado mal, dos días de farleck cortos y largos, 3 días 8 kms, 1 día 5 kms y el domingo 12 kms. Me lo paso bomba, pero es en la tirada larga donde caigo, precisamente el día que mas me gusta. En fin...paciencia. O reviento o vuelvo ha ser el corredor que quiero....
Ya llevo dos meses corriendo seguido, sin descansar. No tengo sensación de cansancio, ni de rutinario. Es más, me lo paso muy bien, vamos a ver si digo lo mismo dentro de los próximos dos meses.
A veces, nuestra obsesión con las marcas nos puede llevar, aunque yo lo aseguro, a dejar de disfrutar de esto. No lo digo ahora que estoy en horas bajas, a pesar que corro más días que nunca, lo digo por el mero hecho de que mirar tanto el crono y terminar nuestros kilómetros con el afán de rebajar segundos o minutos al crono, nos impide contentarnos con el relajamiento que nos entra al terminar nuestro entreno.
Me gusta la competición igual que a cualquiera, pero desde mis inicios de corredor, eso ha sido tratado como segundo plano. Cuando rondaba la hora veintidós en las medias y me aproximaba a bajar de las tres horas en la maratón, corría por sensaciones. A veces esas sensaciones eran tan buenas que la treintena de kilómetros me las hacía a una media de a cuatro el mil. Otras veces hacía las series a toda pastilla, pero los primeros y últimos cuatro kilómetros me los hacía relajadamente.
Para mi todo esto es un juego muy divertido y mi obsesión es salir ahí todos los días. Si estamos en racha y bajamos las marcas, mejor que mejor. Ya me gustaría a mi estar bien ahora, pero para disfrutar, mas aún sin duda, de este gran deporte tan sencillo como es el de correr.
Así que miremos el crono, pero de reojo, si vamos lento en una carrera continua, no pasa nada. En las series es donde debemos de exigirnos un poco, sin llegar al extremo de llegar exhausto a nuestra casa y en la competición, a disfrutar y dar de si todo lo que podamos. Si no nos sale ese crono esperado, no nos desesperemos, tenemos muchas carreras por delante. Así espero llegar a ser un viejo que corre y disfrutar todo lo que pueda de correr.
Adjunto dos tabla (para verla mejor pincháis en ella) para obtener vuestro peso forma o ideal. Midiendo el perímetro de vuestra muñeca, vuestra altura y a la vez vuestra edad, obstinareis vuestro peso. Estas tablas está obtenida de un libro que tengo sobre alimentación y ciclismo.
HOMBRE: Perímetro de la muñeca
-Longilíneo= 12/15 cm. -Normolíneo= 15/18 cm. -Brevilíneo= >18 cm.
MUJER: Perímetro de muñeca
-Longilínea= 10/12 cm. -Normolínea= 12/14 cm. -Brevilínea= >14 cm.
Yo, que soy normolíneo, debería de pesar 62´5Kg, peso 71 Kg, así que me falta... Espero que estas tablas os sea útil.