Primero fue una superampolla en mi talón izquierdo, parón de un par de semanas. Luego me apareció esta lesión en mi psoas izquierdo, otro parón de dos semanas. Vale hasta ahí correcto, injusto porque no había motivo para la lesión por mor de una temporada pésima en kilómetros y competiciones. Pero vale, ok, paro dos semanas, Voltarén comprimidos y reposo. Retomo los entrenamientos, 20 minutos para probar y ahí está la lesión, como el primer día, con toda su fuerza y yo con cara de italiano diciendo porca miseria.
En esas estoy, ese es mi momento actual. La temporada perdida y pensando en que quizas, si los planetas me acompañan, me pase un verano autentico, de los que me gustan, haciendo la tira de kilómetros y preparando un buen objetivo de cara al otoño. Que así sea.
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